Cuando los jugadores comienza un videojuego, siempre se enfrentan a tareas que aún no son capaces de resolver. Para avanzar en la trama y ganar puntos, tienen que aprender mucho. Y los jugadores están felices de hacerlo.
¿Y por qué se sientes felices? Porque quieren aprender cosas nuevas en los videojuegos, y a menudo pierden el interés por el colegio y faltan a clases y a las conferencias de la escuela.
Esa es una de las razones. A diferencia de la mayoría de las escuelas y universidades, los videojuegos hacen de una persona un participante activo en el proceso de aprendizaje. El propio jugador construye su conocimiento: el aprendizaje en acción, tratando de resolver el problema y si se equivoca lo intenta de nuevo. Al principio, el juego no los apura y da pequeñas pistas de cómo ganar. Luego llega el momento decisivo y las pistas desaparecen, la complejidad aumenta, y el jugador solo debe mostrar lo bien que aprendió la lección.
Por ejemplo, si una persona está jugando un juego de acción como Dota 2 y su héroe es atacado por héroes enemigos, el tiempo fluye rápido y no hay más consejos: el jugador está obligado no sólo a jugar lo aprendido, sino también a superarlo, a resolver la tarea más difícil. Si no logra superar el desafío, un jugador ve inmediatamente qué aspectos de la “lección” se perdió o no lo entendió, y por qué lo necesita saber todo en absoluto.
Este proceso corresponde al modelo más respetado en la pedagogía – el modelo de “aprendizaje activo”. En la mayoría de las escuelas y universidades peruanas, lamentablemente, enseñan con el “modelo pasivo”: el estudiante se ve obligado a sentarse, a escuchar e interpretar el discurso del profesor. Es algo así como ingerir comida a través de la garganta sin masticar. Cuando se trata de hacer las tareas u otras prácticas, resulta que la mitad del conocimiento del estudiante está confundido y la otra no está clara.
De hecho, el “aprendizaje activo” le permite a un estudiante/jugador recordar y entender mejor el material estudiado, y siente más alegría de la lección aprendida que con el modelo de “aprendizaje pasivo”, en este sentido, los profesores tienen mucho que aprender de los videojuegos.