Comisionada rusa para los Derechos Humanos compara adicción a los juegos con la adicción a las drogas
La Comisionada para los Derechos Humanos bajo la presidencia de la Federación Rusa, Tatyana Moskalkova, comparó la adicción a los juegos con la adicción a las drogas. “El problema de hoy es que la adicción a las drogas está siendo suplantada por la adicción a los juegos y la partida de los jóvenes al mundo virtual”, dijo Moskalkova. Para combatir la adicción a los juegos entre los jóvenes, ella sugirió aumentar el número de psicólogos en las escuelas rusas.
Moskalkova ya se había expresado anteriormente sobre cómo contrarrestar la adicción a las computadoras. “Hay una necesidad urgente de crear un centro para tratar a los niños adictos a los juegos. Los niños van del mundo real al virtual. “Internet, además de lo positivo, conlleva el mal en sí mismo, y debemos pensar en las palancas reales de la resistencia”, escribió Moskalkova el año pasado.
Anteriormente, el experto de la estación de radio Vesti FM relacionó la tragedia en la universidad Kerch con el juego “Doka 2”, en el que es posible matar a personas con formas sofisticadas y hacerlo en una escuela virtual. Posteriormente, el experto confirmó que estaba hablando de Dota 2. Llamó al juego: “Juego de Nazis” y a sus fans, “clan de oligofrénicos”.
Además, después de la tragedia en Kerch, el diputado ruso Yevgeny Marchenko propuso prohibir y cerrar sitios de Videojuegos.
Consideraciones sobre la adicción a los videojuegos
¿Qué provoca que las personas sean adictas a los videojuegos? Según el psiquiatra Martín Nizama, estos son los motivos que provocan la adicción a los videojuegos en las personas:
- “En primer lugar porque el niño está abandonado por los padres, son hijos huérfanos de padres vivos, que buscan refugio para evadir la soledad”.
- “Las personas adictas a los videojuegos no estarían desarrollando adecuadamente su personalidad y tendrían un desarrollo retrasado (inmadurez)”, razón por la cual serían impulsivos y buscarían experiencias de riesgo para satisfacer su ansiedad.
- “Otro motivo es el vacío espiritual porque no tienen afecto y cariño; la droga tecnológica les llena ese vacío y poco a poco se hacen cautivos de esa conducta compulsiva que es la adicción a la conectividad, que pueden ser videojuegos, redes sociales o la cibernavegación”, indicó Nizama.
- Por otro lado, resaltó que estos motivos no están relacionados con los gamers, que sí tienen un control de su vida y del tiempo que le dedican a los videojuegos; sino más bien, se refiere a los “honguitos”, que pierden el contacto con la realidad y pierden el interés por el estudio y el trabajo.